Makin Maki

Dedicado a esos «emprendedores» que lo único que hacen es ir a eventos a hablar de su idea, que aburren a sus amigos con «lo que se podría hacer»… pero no le dedican tiempo a ponerla en marcha.

Idea para emprendedores: ¡pónganse a trabajar!

Emprender es trabajar para tus clientes y empleados, en vez de trabajar para tus jefes. Trabajar jamás queda fuera de la ecuación.

Tener sueños no es lo mismo que tener objetivos

Soñar es gratis, trabajar requiere atención y enfoque pero más que otra cosa: arranque
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Todos tenemos sueños en la cabeza, un proyecto grande que queremos realizar, un cambio de carrera, una cambio de estila de vida, cambiar de dieta, conocer gente nueva, aprender algo nuevo.
Es fácil soñar sobre estas cosas. Pero soñar no cambia vidas – hacer y realizar cambia vidas.

Cuando decides montar tu proyecto empresarial un punto muy importante es el «donde», pero no solo el donde en el mapa (un sitio cercano a tus clientes) o el donde que sera «Sede social» a nivel administrativo, sino donde va a estar tu mesa de trabajo. Los desarrollos en internet tienen la ventaja que pueden ser realizados sin disponer de oficinas, sino simplemente poniéndote delante de la pantalla de tu ordenador, que puede estar en el salón de tu casa. Pero hay otras opciones.

En casa

La primera etapa siempre es en casa, ahí has ido gestando tus ilusiones y tus proyectos en papeles que almacenas en una carpeta y en archivos en el disco duro de tu ordenador personal. Pero cuando llega el día de ponerse a trabajar tienes que crear un lugar en tu casa que sea tu lugar de trabajo, y que de alguna manera sea distinto a tu casa, que sientas que al sentarte ahí estás EN el trabajo (y mejor si los de tu alrededor también lo saben). Las reuniones con los socios/compañeros/trabajadores entonces se pueden hacer en el salón de casa o en algún lugar público, pero en todos los casos no suelen ser todo lo cómodas que podrían ser (o a veces son demasiado cómodas y provocan dispersión).

En un espacio de coworking

Es un medio camino entre la oficina tradicional y el estar en casa. Porque es un lugar al que vas a trabajar con mas gente, pero esa gente que te rodea tiene sus propios proyectos, sus propias empresas. El precio es muy bajo por que se paga por una mesa de trabajo, y en ocasiones hay tarifas según el uso de horas al mes. La «mesa» suele no ser fija, cada uno llega con su portátil. Se cubren las necesidades básicas (luz, internet, mantenimiento).

Vivero de empresas

Mas cerca del sentido tradicional de «oficina», un despacho para crear tu empresa (solo está disponible para los primeros años de la empresa) por el que se paga un alquiler bastante bajo. Incluye espacios comunes (salas de reuniones, recepción), y sigues teniendo unos vecinos con los que conectar.

Y en estas ando en este momento, divagando cual será mi próxima oficina…

Hoy un par de listados de ideas motivadoras.

Yoriento: EmprenDIEZ: decálogo de motivación para emprendedores

1. EMPRENDE YA. No intentes “ser emprendedor”, simplemente emprende.
2. ENFÓCATE el tiempo necesario en los momentos adecuados.
3. DIVERSIFICA emprendiendo y reduce así tu riesgo profesional.
4. SE PUEDE. Lo que se aprende cuando se emprende, es que se puede emprender.
5. HOY. Las ideas no mueren, pero sí la inspiración: actúa hoy mismo.
6. CONSTRUYE ya algo básico y mejóralo luego.
7. FINANCIA la iniciativa con la ayuda de tu familia.
8. EL MERCADO nunca está “preparado”, hasta que alguien demuestra que sí y los demás ponen cara de tontos.
9. SI NO GANAS lo que vales, ¡emprende!
10. ¿Qué vas a hacer ahora?

El Punto 6 es una GRAN verdad que a muchos se nos olvida. Pero la gente de TetuanValley nos lo recordaba. Recomiendo leer el artículo para entender cada punto.

Hábitos vitales: 6 lecciones de la vida que me enseño Albert Einstein

“No tengo ningún talento especial. Solamente tengo una curiosidad pasional»

En el primer segundo, la idea llega a tu cabeza por cualquier estímulo del exterior: un problema. Tu cabeza piensa que ese problema puede tener una solución. durante un tiempo, rumias la idea en tu cabeza perfilando la solución, pensando que quitar que poner, hasta donde llegar (normalmente poniendo como límite el cielo o mas allá).

Luego bajas a la tierra y dices, ¿por qué esta solución no se le ha ocurrido a nadie antes? Y entonces es cuando comienzas a investigar que es lo que ya se ha trabajado en esa materia y descubres que hay mucho hecho, que hay ideas sueltas que agregadas de la manera correcta pueden dar una solución redonda. Tú puedes ser el pegamento que una todas las piezas para crear.

No lo neguemos, en ocasiones encuentras que tu solución está ahí, que alguien ya la inventó, pero que no hubo suficiente publicidad y por eso no llegó a tus oídos (o simplemente no estaba bajo tu radar, porque el problema no es tuyo, es de un área en la que no te habías movido previamente)… Y en ocasiones, a pesar de todo, piensas que tú lo puedes hacer mejor.